Preguntas Frecuentes
Se suele tomar como referencia 100 frigorías por m².
 
Por ej.: un cuarto de 30m² necesita unas 3.000 frigorías. Si el espacio
          tiene muchas ventanas, techos altos o exposición solar, es recomendable
          aumentar a 120-130fg/m².
 
La fórmula más precisa es: largo x ancho x alto x 50 (frigorías/h), o bien
          ajustar según condiciones específicas como orientación, aislamiento o carga
          térmica.
Recomendamos un servicio anual que incluya:
 
Limpieza de filtros y serpentines (evaporador y condensador);
 
Control de presión de refrigerante;
 
Revisión del drenaje;
 
Comprobación de componentes eléctricos (capacitores, termostatos);
 
En equipos inverter, verificación de sensores electrónicos.
 
Así prolongás vida útil, evitás averías y optimizás consumo energético.
Claro, todos nuestros trabajos tienen garantía profesional.
Cumplimos con los requisitos del fabricante y la normativa vigente.
Además brindamos cobertura propia sobre mano de obra por un período determinado,
          según el tipo de servicio.
 
Consultanos y te lo detallamos por escrito.
Una instalación profesional suele durar entre 2 y 4 horas, dependiendo
          de:
 
Tipo de equipo (split simple, multi-split, inverter);
 
Complejidad de la conexión (tablero, tubería, ubicación);
 
Acceso al espacio y condiciones estructurales.
 
Nuestros técnicos matriculados planifican previamente para garantizar eficiencia,
          limpieza y cumplimiento de estándares.
Trabajamos e instalamos todas las marcas del mercado: Samsung, LG,
          Midea, Surrey, Carrier, BGH, Hitachi, Sanyo, York, Tophouse, Noblex,
          Philips, Gafa, Electra, entre otras.
La elección depende de tus necesidades —potencia, tipo de tecnología inverter,
          presupuesto y disponibilidad de postventa—.
Te asesoramos para que elijas la mejor opción.
Usá una configuración razonable (22-24°C) y evitá temperaturas
          demasiado bajas.
Programá termostatos o modos “eco”.
Mantené filtros limpios para mejorar la eficiencia.
Complementá con ventiladores y cerrá cortinas para reducir carga térmica.
La vida útil depende del uso, mascotas y calidad del aire.
Como regla general:
 
Residencias sin mascotas: cada 2-3 meses.
 
Con mascotas o alergias: cada 1-2 meses.
Posibles causas:
 
Drenaje tapado o serpentines congelados;
 
Baja carga de gas (fuga), filtros sucios o fallas eléctricas.
 
Ante estas situaciones, es mejor llamar a un técnico matriculado, ya que
          incluye diagnóstico correcto y solución profesional
Durante el mantenimiento anual verificamos niveles de gas y si hay
          fugas.
Si existe una fuga, se debe reparar antes de recargar, para evitar daños
          ambientales y pérdida de eficiencia
